viernes, 31 de octubre de 2008




Bienvenidos a la noche del terror, donde los niños deben esconderse y las brujas preparan pócimas en su marmita. Una de las noches mágicas del año, donde todo puede ocurrir, incluso que no amanezca nunca más... JAJAJAJA
Es la noche del miedo, contaros historias y llorad malditos, llorad!!!!
Espero que paseis un buen Halloween y un, no menos bueno, fin de semana...

jueves, 30 de octubre de 2008


Enciendo tres velas que iluminen mi alma, apago las luces y me enfrento a un folio huérfano de palabras para rellenarlas de sentido. En esta amnesia de vida se hace difícil pararse un rato a contemplarse a sí mismo, conversar con una conciencia que tenemos mal cuidada. No atendernos puede hacer que no entendamos el mundo que nos rodea. Y reconciliarse con quien ves en el espejo, cada ciertos días, se hace necesario para poder tomar aire en un ambiente, si bien, irrespirable.
Y uno busca que te busca, trabajos, hobbies, parejas, coches, hipotecas, ropa a la última, amigos, y no nos damos cuenta de que primero es encontrarnos a nosotros, luchar contra miedos y recelos para construir de alguna forma un castillo de valores y de actitudes, que nos guie en lo bueno y en lo malo, y dejarnos llevar... De lo poco o mucho que me ha servido esta terapia, llamar a una puerta que tenía más cerca de lo que creía y que permanecía medio abierta. Enfrentarme a una guerra perdida de antemano con batallas realmente duras, y exteriorizarlo, escribirlo, me ha sido difícil, como cuando te rajan en canal, pero fue para darle una medicina a mi alma que ha curado órganos que tenía mas bien dormidos. Y he aprendido a valorar mas a las personas, aunque si bien es cierto, he terminado por odiar con mas fuerza a los mediocres de medio pelo y a cenicientas sin hora de llegada. Una terapia que me ha hecho más fuerte, más humano. Es un honor que seais testigos de esta guerra.

miércoles, 29 de octubre de 2008


Vuelta al tajo, un miércoles frío de otoño. Tan frío como los corazones de muchos, tan gélido como las almas de ilusos protagonistas de una realidad cruel, la que vivimos. Pero a veces te tropiezas con gente que merece la pena entre tanto desagravio. Surge de vez en cuando, pero hoy sucedió. Les hablé en alguna ocasión de Antonio, donde me da de desayunar "el mejor café del mundo", con su estampa goyesca, su tripa de buen vivir y su calva incipiente que trata de ocultar con cuatro pelos repeinados. Debajo puedes encontrar una persona enamorada de su familia, de su trabajo y de su esposa. Tiene una capacidad innata para decir lo que tiene que decir, como esos pícaros del siglo pasado.

Pero hoy no era él, no estaba atento y su media sonrisa de todos los días se convertía en gesto contrariado, me quedé observándolo y él se dio cuenta. No supe sino espetarle un sombrío -¿Como estamos?.- Y él, casi sin mirarme, hizo un gesto de esos que se hacen cuando no tienes mucho que decir. No me atreví a preguntar nada más. Pero pude escuchar a los camareros que iban por mesa que Antonio llevaba días sin dormir en casa porque estaba enfadado con su esposa, una mujer de esas de las de antes, de anchas caderas y fuerte presencia, a la vez que elegante y hermosa. Un hombre y una mujer, padre y madre de sus hijos, de barrio humilde pero de corazón gigante, trabajadores desde muy temprano, mirando cada céntimo para que sus hijos se formen y sean buenas personas, a su imagen y semejanza. Y a todo esto pensé en mis padres y en mis hijos, cuando los tenga, y me acordé de Antonio... un ejemplo, de los buenos....

martes, 28 de octubre de 2008

Estoy a las tantas delante de un canal de esos de pago, en un canal de esos de animales, los de verdad, digo, y sale lo de la langosta en Canarias, con los bichos posándose en un sembrado y dejándolo hecho cisco al largarse. Entonces me puse a hacer analogías. Igualito que los políticos de aquí, concluí. Lo que tocan lo hacen polvo. Todo vale para ese estómago voraz que pone cuanto existe al servicio de su ambición, de sus ajustes de cuentas, de su bajeza moral. De esa España virtual que se han inventado, ajenísima a nada que tenga que ver con la España real, pero que nos imponen día tras día, porque ése es su miserable oficio y su negocio. Y claro: asunto que pasa por tales manos, asunto que va a la mierda, sin crédito, sucio para siempre. Y como la política se alimenta de sí misma, el apetito es insaciable. Queman cartuchos sin respetar nada ni a nadie, dispuestos a cargarse lo que sea con tal de aguantar una semana más. Y cómo se odian, oigan. No se mandan pistoleros unos a otros porque no pueden. Y encima se creen originales, los malas bestias. Si fueran capaces de leer, sabrían que todo cuanto hacen se hizo ya. Desde Pilatos, o así. Pero es que, excepto dos o tres, no saben ni quién fue Pilatos. Y así nos va. Ésa es nuestra desgracia: los políticos. La plaga de langosta. La perra historia de España.

lunes, 27 de octubre de 2008


Lamenten su suerte, vuelve a ser Lunes. Pero no lamenten la mía, me hallo en Huelva, entre sábanas oliendo a frutas y desayunos a destiempo, donde madruga el Sol pero no la persona que les habla. Maravilloso exilio.

EL sábado pude escuchar el discurso de Ingrid Betancourt, presa por la guerrilla de las Farc durante años, aislada de lo conocido y mordiendo lodos de infamia cada segundo que seguía respirando. Ha sido condecorada con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia por agarrarse a la vida cuando no había muchos argumentos para ello. Su discurso, tan humilde, tan dulce, debería formar parte de los diseños curriculares de ESOS, EGBS, BUPS o como se llame...

Curiosa paradoja, gente que ve de cerca la muerte y el sufrimiento, y son los que más amor desprenden...y me enorgullece escuchar de esta mujer su canto contra la indiferencia, la que tantas veces he nombrado en estas lineas.

Aprendamos a valorar lo que tenemos y a los que nos quieren, aún siendo Lunes...

viernes, 24 de octubre de 2008

Fin de semana para perderse entre montes, para compartir momentos con amigos, para pensar y dejar de pensar. Elijan su opción y disfruten, que las horas pasan rápido y no vale el domingo a última hora lamentarse. Aprovechen estos dos días y purifiquen almas y pulmones, como si fuera el último de tu vida, si es que te motiva un poco más la dicha. No busques más de lo que puedas encontrar, pero agarra bien los minutos en los que cobras dignidad, en los que el trabajo queda lejos sin estarlo. No tenemos mucho margen de acción en la vida, pero estos pequeños huecos son tan necesarios como suficientes para dar sentido a la amarga existencia que malvivimos entre semana. Respiren un poco, o dejen respirar al menos, en un mundo que aprieta y que ahoga... Buen finde

jueves, 23 de octubre de 2008

Hace poco me preguntaron si hacia poesia tambien. Para mi escribir poemas es como escribir con la mano izquierda, torpísimo y sin habilidad alguna. Pero como no todo van a ser aplausos, ahi teneis, para que os riais de mi un ratito. Al hacerlo pensé en el mundo de mierda en el que vivimos, en el que nos matamos por poco, y la promesa que deberiamos hacer de empezar de nuevo...


Ya torna el viento a la calma, lanzas aparcadas
Armaduras en ristre y heridas abiertas
Campos de flores, de rojo teñido
Oscuridad sin ser invitada…

Ojos girados hacia el cielo,
Lagrimas que acarician mejillas inocentes
Manos agarrotadas, como el animo
Un mundo sin mundo,

Hermanos contra hermanos,
Sonrisas contra sonrisas, desdicha,
Calor y hielo, donde nadie vence
Mas el mal con su media sonrisa…

Verdadera guerra por hacer,
Engañar destinos y quehaceres,
Matar demonios y prometer abrazos
Besar paraiso en tierra fértil… un hechizo.

No quieras caminar si no es de pie
No quieras llorar si no es alzado,
No quieras amar sin ser amado
Amor contra desidia, debiera ser la guerra.

Y solo tu ante ti mismo
Poderosa la conciencia que mata y no pregunta
Horribles tus movimientos que asienten y no escuchan
Inventa maneras de vivir, diferentes a las de hoy...

Solo tu mano decide…

miércoles, 22 de octubre de 2008

Relato rescatado del olvido.Dedicado a las madres...

Mi hijo no comprende. Viene a verme cada viernes, durante una hora y media, y cree que con eso ha cumplido. Tomamos café despacio, sorbo a sorbo, mientras él aspira un Ducados. A veces lo aplasta a medio fumar en el cenicero, y al poco prende otro. A mi hijo lo matará un cáncer.

El café le dura mucho a mi hijo, lo hace durar. Arrastra cada sorbo como si en ello le fuera la vida, entre calada y calada. Me observa con los ojos entornados y la mente cerrada a cal y canto mientras la cocina se va llenando de humo. Mi hijo recela de mí. Cree que le miento. Yo creo que en realidad lo que ocurre es que no le gusta mi café.

Mi hijo tiene un BMW, un chalecito en la sierra que todavía no he visto y una mujer que se me atraganta como un hueso de aceituna. En ocasiones ella también viene y yo la abrazo, gentil, y ella me abraza, gentil, y nos besamos en la mejilla como dos Judas traidores que tan sólo esperan su oportunidad para apuñalarse. Pero ella no suele visitarme demasiado a menudo. Está ocupada, comenta mi hijo, que es lo mismo que decir que no le apetece. Soy demasiado vieja para su gusto, demasiado arrugada, huelo mal, a aburrimiento y ancianidad.

Yo llamo mucho a mi hijo por teléfono, para recordarle que venga el viernes y que me traiga una de esas cajas grandes con doce cartones de leche, que yo no puedo cargar con ellas; que necesito aceite, harina, verle. Él viene cada viernes, de cinco a seis y media, a la salida del trabajo y me sube el recado, obediente. Siempre fue un buen chico, mi hijo; el único problema es que no comprende.

Nos solemos quedar callados, los viernes, a la hora del café. Yo siempre tomo dos tazas. Él pospone la suya. El cenicero se va llenando de ceniza negra, mortecina, triste, como recuerdos. Aunque a veces hablamos. Le resumo yo mis dolores, mi ciática, mis nostalgias. Él asiente con la cabeza y hace como que bebe, pero luego deja la taza sobre el platillo manchado por dos goterones marrones de torrefacto y yo veo que sigue mediada. Lo que te pasa, mamá, es que no sales. No te relacionas. No juegas al dominó con las amigas, o al bridge, o a lo que quiera que jueguen tus amigas.

Luego se va, mi hijo, y yo le doy un beso en la mejilla y él otro a mí, al aire. Hasta luego, mamá, hasta el viernes que viene, que me estará esperando ya Mercedes. Yo le digo también que adiós, aunque omito lo del hasta el viernes. Él da media vuelta y yo cierro la puerta, pero le espío por la mirilla, delgado como está, esperando al ascensor que sube con un traqueteo profundo. Contemplo la escena deformada por el ojo de pez, que ensaya una lágrima, siempre ensaya una lágrima, como todos los ojos de pez; contemplo esa puerta metálica, verde, fría, que se abre y le engulle, como un pez, a mi hijo.

Mi hijo no comprende. Yo quemo cartuchos y vacío cartones de leche en el desagüe. Luego me quedo sentada en la mecedora, esperando que pasen los días, sin moverme aunque las moscas me recorran el brazo. Eso pienso, que no me moveré, aunque una mosca me recorra el brazo, o se me retuerzan las tripas. Si aguanto así mucho, volverá para verme, preocupado, tal vez el martes, o el domingo, para ir a misa de ocho. Hace veinte años que no vamos juntos a misa de ocho. No me muevo. Miro el teléfono y evoco el recuerdo de su número en la sierra.

Y me quedo así, muy quieta, como muerta, como dormida en mi mecedora. Como embalsamada. Ya nadie comprende.

martes, 21 de octubre de 2008


Jugarme media vida entre el tráfico cada mañana me ha devuelto algo de ilusión por madrugar. Como si de una competición se tratase, sortear obstáculos con la bicicleta me hace liberar endorfinas necesarias para el mal trago de levantarse temprano. Y todo gracias al denominado Sevici, un servicio privado pero concertado con el Ayuntamiento, con el que podrás coger una bici en un punto de la ciudad y dejarla en otro sin mayor preocupación. Y todo esto gratis para el bolsillo y para la mente. Olvidate de aparcar en horas puntas y de semáforos que se ponen en rojo a destiempo.
Y es que no sólo voy a poner verde aquí. Las cosas como son, un minipunto o gallifante o lo que ustedes quieran para el ayuntamiento de Sevilla que impuso este servicio, aún mejorable, desde luego, pero al menos la declaración de intenciones es positiva.
Espero que no me falle un día la dirección de una bicicleta y me dé de bruces con un muro y me quede para regar polvorones de ázucar, hasta entonces, me seguiré jugando mi suerte...

lunes, 20 de octubre de 2008

Lunes de lluvia y tráfico. Ya los rostros desencajados propios de tal día miran hacia el cielo con la boca abierta y las mejillas salpicadas de agua sucia. Los niños corretean por aceras con mochilas que doblan su peso, pensionistas que se acercan a la Caja a ver si sus ahorros siguen en pie, y una marabunta de tubos de escape que hace temblar al mismísimo Hades. Y es lo que nos queda, al menos cinco días por delante del mismo color gris, ese que hay por las mañanas a la hora del pringao. Anhelo esos años de estudiante sin ser estudiante en los que tenía verdaderos problemas para llegar al desayuno de la residencia, en los que vivía de verdad, sin responsabilidades, sin deudas, sin coches ni casas que pagar... y encima aprobaba...
Bueno, nos queda la ilusión de un Viernes que parece lejano.
Gracias, tengo que daros, por las visitas y los comentarios que últimamente haceis en la página. Dan sentido a esto...

viernes, 17 de octubre de 2008


La mejor de las novelas, sin duda. Creciste en un pequeño pueblo, de calles encaladas, en el que el Sol aparece noble hasta la penumbra, de esos lugares en el que el tiempo no corre, camina. Habitabas en casa humilde pero no faltaba un puchero, una fruta fresca y un chocolate los domingos. El aburrimiento apaciguaba sentidos tanto como los educaba. Pasaste inventando mundos durante una infancia de salud débil, tanta imaginación en un envase tan frágil.
En una época en la que había poco que elegir, un día, sin más, empezó tu aventura, tan fascinante como peligrosa, tan triste como enriquecedora. Madrid, tu destino, nada que ver con tus casas bajas de fachadas blancas, nada que ver con la mirada de una madre que no veía más allá de tu nuca, porque no le importaba nada más. Tu empresa, sin ser empresa, herencia de la ignominia, asesina de libertades y creencias, y todo por una bandera que cada día iba perdiendo color. Destinos peligrosos, lejanos, amigos caidos, maniobras en medio de la nada, juicios a destiempo, sinsentidos en un mundo sin sentido, y con cuatro almas en casa a la espera de una voz tranquilizadora, la que siempre dabas, la que quizás no estábamos preparados para oir...
La mejor lección que dió a sus hijos, el esfuerzo y el talento no estan reñidos, se necesitan tanto como se repelen a veces, pero puede hacer que termines proyectos, dar paz a tu alma, fuerza a tu corazón. Y con esos ingredientes te superaste, una licenciatura, una enfermedad, un matrimonio, una paternidad. Obstáculos que convertías en virtudes de tus mundos, siempre con la mano tendida al que no ve lazos por ningún lado. Tu calidad reside en tu destreza tanto como en tu fuerza de espíritu, y eso me hace estar seguro que, en tu vida, nadie que se haya acercado un poco al umbral de tu alma habrá quedado indiferente. Para bien, para mal, los sumergiste en un océano de posibilidades desconocidas hasta entonces. Y sigues luchando como el primer día, cada domingo cuando te vas, cada paciente que recibes, cada palabra que a tus hijos dedicas...y siguen sin dejar indiferente...
Como te digo cada año por esta época, te admiro tanto como te quiero y te respeto tanto como te necesito. No entiendo mi mundo sin tu genética, que es la mía. Mis letras son mi único homenaje, sin ser mías, porque tu me enseñaste... a escribir la mejor de las novelas, la nuestra...
Feliz Cumpleaños Padre

miércoles, 15 de octubre de 2008



No, no es Marte, es el Rio Tinto, a 3 kilómetros de mi pueblo, en una barbacoa que hicimos el Domingo y en la que estuvimos bastante a gusto. Cervecitas y carne en salsa, además de buena compañía y muchas risas.
No le pidan mucho más a la vida que unos pocos buenos ratos con los que aprecias.
Hoy no me siento muy hábil en palabras, por lo que me refugiaré en esta foto y en estas pocas letras... que no son poco.
Ojala lo repitamos...

martes, 14 de octubre de 2008


Compañero de travesía, que a veces te asomas a husmear en palabras de quien creías conocer, que a veces me abandonas durante semanas sin dejarte ver, dejarte notar... Hoy quiero intimar contigo, me gustaría que encedieras una simple vela, música de fondo, o quizás imagina olas de mar rompiedo en la orilla de una playa en la que pasamos la noche alrededor de un fuego humilde a la vez que sincero. Un buen vino y una noche estrellada, de esas de verano en la que tu mundo y el mío se paran, una tregua entre tanto movimiento, y nos permite mirarnos y contarnos verdades. Este es mi pequeño homenaje, para el que me sigue y para el que me persigue, para el que puede mirarme aún sin conocerme. Esta terapia que empecé y que da resultado, y vosotros protagonistas de mi mundo más que nunca, y que siga sucediendo...
Pues deja, compañera, compañero, que abrace tu verdad, tus gestos, y pídeme el mundo si así lo deseas, pero no dejes de visitarme de vez cuando, porque me haces sentir vivo...
En todo este tiempo nos enfadamos por horribles sucesos, nos reimos de hilarantes anécdotas, nos pusimos serios cuando debimos, nos emborrachamos de desgracia tanto como de amor propio y de valentía, nos disfrazamos de lo que no éramos y nos abrazamos en la distancia que nos da, que os da, el anonimato. Pero jamás dejé de sentirte.
Sólo espero que ésta travesía os haya enseñado tanto como yo he aprendido de mí mismo, gracias con mayúsculas, a los que os conozco, por vuestro magisterio, a los que no, por vuestras enseñanzas. No me perdereis...

lunes, 13 de octubre de 2008


Me levanto de buena gana, aunque sea Lunes, si la primera noticia que escucho yendo al trabajo es el hundimiento total de los bancos y las Bolsas del mundo. Tanta alegría me produce que quisiera llorar de emoción y alborozo, cual talilbán ante su virgen. El poder al servicio del destino, el rico jodiente empieza a ser jodido, el especulador especulando sobre su amargo futuro, el cacique encacicado...

Albricias!! Ya el humilde, el currante, el parado y semejantes no son los únicos humillados por un mundo capitalista que aprieta y ahoga, por mucho que Dios se empeñe en lo contrario. Sí, es cierto, nosotros los descamisados de tres al cuarto, por ser parte de la última cadena trófica, más perjudicados, pero tenemos una ventaja, estamos acostumbrados..

Y ahora volad libremente ricos y políticos e inversores de este magnífico mundo, volad a través de vuestros altos ventanales de altos barrios. Apagad vuestra vergüenza con vuestro suicidio, tan necesario como utópico. Y caed en la dura realidad del que no respira porque no existe aire que respirar y del que resbala constantemente en un mundo de mantequilla. Morid malditos, y llevaros al otro mundo mi carcajada... la carcajada de un pringao que no tiene un duro en Bolsa..

viernes, 10 de octubre de 2008


Intentaré hacer una breve crónica desde mi facultad, provincia de un país elitista llamado Universidad. Lo que veo no me gusta, a mi alrededor alumnitos y alumnitas con una idea clara, el Aprobado. Olviden eso de la formación en valores, decencia humana y demás imbecilidades. El 5 justito, o el 9.5, me da igual, una nota es todo a lo que aspiran, y cambian a la mejor de sus amigas si es necesario, a quien sea por tan noble código alfanumérico.

Hay de todo, pero hablaré de lo que abunda en mi provincia. Mojigatas de muy señor mío, ceceo más allá del ceceo, con los mismos valores que una escoba y la misma pulcritud textil que una doncella en casaderas. Preguntas imbéciles en clases imbéciles donde, al final, parece que el único imbécil es uno mismo. Se reiteran tanto como la última frase, se contradicen tanto como lo que vivo y lo que escribo. Y a todo esto, papas y mamas detrás sufriendo por la nena.

Si Platón levantara de la tumba y viera tanta mediocridad en el único sitio donde debería estar prohibido...
El saber no ocupa lugar, y en mi facultad se cumple el dicho, no ocupa porque no existe.
Me siento huérfano en esta provincia, mi mejor Universidad?? yo mismo... con mis problemas..., donde, curiosamente, más veces he suspendido....
Buen fin de semana

miércoles, 8 de octubre de 2008


Si hoy se asoman buscando palabras amables aún están a tiempo de cerrar la página y pasar a otra cosa.
Pensándolo mejor, cierren de todas formas, porque es lo que yo voy a hacer... despues de vomitar unas cuantas palabras...

stress, ciudad, niñatos, canis, politicuchos, carril bici, trafico, vivienda, dinero, más dinero, más deudas, deudores, acreedores, mal tiempo, buen tiempo, calor, frio, madrugar, amigos, amigas, novios, colores grises, lunares, pelo, gomina, gafas, lentillas, facultad, profesores, alumnos, sistema, antisistemas, trabajo, aparcamiento, barriga, comida, mundo, personas, familia, moviles, ordenadores, sonitonos, cartera, tarjetas, libros, apuntes, matriculas, suspensos, indecencia, timidez, educacion, autoestima, humildad....

Todo lo que no sirve, a la basura...

martes, 7 de octubre de 2008


Ayer falté a la terapia, el cansancio, que no es excusa, pero cuenta, pudo conmigo. Llegue de MAdrid el lunes temprano, después de haber conducido casi toda la noche. Estuve allí con mi familia, viendo al "brujo" en el teatro Infanta Isabel y el domingo yendo al partidito del Madrid.
Todo perfecto, ya saben, de MAdrid al cielo, aunque hay cosas que resultan contradictorias, pero no será hoy cuando las relate.
Por lo demás, empiezo oficialmente mi particular annus horribilis, que se puede convertir en todo lo contrario con muecho esfuerzo y un poco de suerte....
No me apetece escribir mucho más... hasta mañana

viernes, 3 de octubre de 2008

jueves, 2 de octubre de 2008

Pasear por el centro se puede convertir en toda una aventura si afinas un poquito. Se hace muy agradable el paseo por calles mágicas, que esconden tanto talento como ignominia. Y fue en esas, tomando una cerveza en la calle que baja a la Giralda cuando me dio por acariciar un perro fornido y precioso, de cuello alto y fiel estirpe, ojos miel y pelaje noble, de esos que marcan cánones. Lo llevaba un escolta, decía, de alguien importante, decía no ser suyo, y que valía seis mil euros el chucho na menos, campeón de España de razas, con su correspondiente orejita marcada. En un momento, el personaje que lo llevaba nos dio toda una lección de adiestramiento. "Sit" y el can se sentaba, "dame un beso", y el perrito le relamía. Que para mis adentros pensé, eso lo hace también el chucho de mi hermana y no es famoso... La cosa es que el hombre, que decía ser facha y ultra, se nos quedó alli en media acera un rato, sobrepasando esa delgada línea de la incomodidad... Y a todo esto pensé, mierda de mundo, hasta los perros son racistas.... por nuestra culpa.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Hoy estoy de mejor humor, quizás sea que se acerca el finde. Pensé mucho ayer por la tarde, ejercicio muy práctico y sano cuando tienes entre manos mil problemas y dificultades para llevar una vida medianamente saludable. El problema de mi personalidad es que arrastro, para bien o para mal, a los que me siguen y me adoran, a los que tengo más cerca. Pero siempre, despues de la tormenta, torna la claridad de un Sol, nublado, pero al menos no hay que acudir a luces artificiales...
Y es ahí cuando me siento culpable, jamás fui de medias tintas, pero en este aspecto me hubiera gustado ser de otra manera...
Hoy no contaré ninguna historia, no espereis reflexiones o críticas ácidas. Hoy utilizo este apartado como confesionario de mis actitudes, tan extravagantes como mezquinas. Y cargaré con mi propia penitencia, intentar ser más positivo en la vida, valorar a quienes me quieren y me respetan y no caer en la autodestrucción, más líbranos del mal....