martes, 31 de marzo de 2009

Inviernos eternos...

Les avisé que no guardaran los abrigos, ya les dije que el invierno y la primavera se compinchan para rellenar la cuota de resfriados y bajas laborales que la pereza no llega a colmar. Ya escuchamos los clarines de Semana Santa a la vuelta de la esquina con sus corbatas y colonias del todo a cien, un Domingo de Ramos más que se huele en la madrugada y que nubla la conciencia de los que aman la mesura, que son los menos, los mismos que desconocen quejarse a grito pelado, ese tono que por estas tierras da y quita razones...
Moriré repitiéndome, pero prefiero el riesgo de tener que esquivar zancadillas en mi camino al trabajo que perderme en bosques de conformismo disfrazado de lo políticamente correcto o establecido por el género habitual. Y es que no importa si llora ante un palio o si se emociona ante la lumbre de la feria un año más, no pretendo minarle los pocos alicientes que no prohibe una vida que ahoga, pero permita que le pida que dé un sentido íntimo a la fanfarria y que relativice verdades que parecen de todo menos efímeras rodeado de tanto acólito. Deje usted que le suplique pensar un solo minuto para sí mismo sobre los pasos que persigue y reflexionar sobre lo que vive, lo que quiere, y lo que espera de su existencia, y después disfrute la juerga del cirio o del rebujito a mil por hora, como merece, pero no aminore para luchar contra la injusticia y la desidia, y contribuirá en silencio a acabar con este inmisericorde invierno, que es eterno…

lunes, 30 de marzo de 2009

La sonrisa de Velázquez..

La España de la pandereta y el chufla que triunfa ha hecho méritos de sobra a lo largo de la Historia para poner pelos de escarpia a las mentes más lúcidas y serenas, esas que tristemente vienen estando en extinción, y Sevilla, capital mundial de la falacia y el trapicheo, no iba a ser menos, y si no al loro. Sólo tienen que dar un garbeo por el centro y salir al paso de la Giralda, majestuosa, que no es otra cosa que un minarete musulmán propio de la hegemonía mora en la tierra con una torre católica en todo lo alto. Churras con merinas. ¿Para que tirarlo y hacer una torre de las nuestras?, pensaría el arquitecto de turno de la Corte. Nada nada, un campanario por aquí, un par de Santos por allá, unos cuantos angelillos sin sexo en las cornisas y listo, ahí tiene usted su torre profanada, con mezcla cultural y todo, ahora que viene estando de moda eso de la globalización. Que imagino que los gobernantes de la época dirían, “-Sí, sí, respetamos las raíces de los anteriores inquilinos de ésta ciudad, pero el morito bien lejos oiga, que tanto hereje suelto huele y hasta molesta”...
Sigan paseando que es gratis, hasta que lleguen a Plaza Nueva, donde gobierna la estatua de Velázquez con amplia sonrisa, descojonado de la gentuza que justo enfrente entra todas las mañanas por las puertas del Ayuntamiento. Y le notas horrorizado, pensando que cualquier otro tiempo fue mejor. Cada vez que paso a su vera le noto la carcajada más sincera y el corazón más melancólico...
A todo esto , queridos amigos, en cada paso pongan mil ojos, porque, mientras usted anda embelesado, proliferan truhanes que acechan su cartera a la espera del descuido para hacer su Agosto, ya saben, en la jungla vale la ley del más fuerte, aunque aquí fuerza se identifica con ser listo, pero listo de espabilao, que chuflas los tenemos a montones, pero Premios Nobel ni uno…
Eso sí compañeros, si quiere usted juerga ha venido al lugar adecuado, es más, corre usted el peligro de no irse jamás. El sevillano de a pie es muy celoso de sus cosas, es de esos Homos que piensa en Ferias y Semanas Santas cuando le hablan de Cultura y Folklore, nada de libros ni tesis doctorales, eso es de tontos y aburridos.
Todo esto vienen a ser detalles, pero hay datos para el que tenga dudas. Capital de la Comunidad más pobre de España, donde el Metro lleva veinte años haciéndose, allí donde mezclan en gazpacho lágrimas detrás de un santo y saetas con trajes de faralay y cogorzas de órdago. La ciudad donde el robo y el trapicheo es la norma, y que ostenta el dudoso record de consumo de cerveza de toda Europa. Una ciudad que hace una Exposición Universal emocionante y la olvida a su suerte al poco pero que no dudan un solo segundo en echarse a la calle para pedir cadenas perpetuas como borregos y no escatiman en suplicar créditos a la Sucursal más cercana para el ticket de la caseta de la Feria que asoma el mes que viene.
Ahora vengo entendiendo la sonrisa del pintor, claro, ahora me doy cuenta el porqué de esa carcajada que cada mañana se hace más ruidosa del excelso Velázquez, lo que me extraña es que no haya colgado el pincel y la acuarela y entonara el –Ahí os quedais!!-, huyendo por patas y por piernas, sin mirar atrás, como quien deja una Patria de barro y de mentiras...

viernes, 27 de marzo de 2009

jueves, 26 de marzo de 2009

Paridas y Paridades..

La estupidez humana es innata, se hereda de padres a hijos, pero descuiden, también puede usted aprenderla si no nació con esa suerte. Habrán oído hablar de la Ley de Paridad, la penúltima idiotez de nuestros gobernantes plasmada en papel, que establece que en organismos públicos debe existir el mismo número de hombres que de mujeres en puestos directivos y de relevancia. Da igual la demanda y el currículo, es decir, que usted, siendo hombre, teniendo la misma nota en un exámen de méritos que una mujer, quedará relegado al olvido por cargar con miembro viril e invitados desde que asomó la cabeza por la flor de su madre, ya me entienden. Tal como lo veo, una discriminación aceptada, de esas mociones que no imparten censura ni levantan pancartas. Y cierto es que históricamente la balanza de la igualdad ha estado posada siempre de un lado, pero cabe pensar que es de burros y chapuzas compensar la injusticia añadiendo al otro lado de la pesa toneladas de idioteces. La paridad es buena, es positiva, enriquece, pero forzarla es como traer a los negritos de Kenia del cuello para que se integren en una civilización que ahora les rechaza. Así no se hacen las cosas, sobre todo cuando no hace falta complicarse mucho la existencia. Señores políticos, inútiles hasta que no se demuestre lo contrario, se trata de no discriminar por el sexo, ni por un lado ni por otro, que no se enteran de la movida. Y puestos a jugar a Fray Torquemada, discriminen entre políticos malos y políticos peores, y ríanse las gracias mutuamente, pero al humilde trabajador, al opositor buscavidas y al sacrificado jornalero deje de joderle la vida. Y si aún así no lo tienen claro inviertan el cotarro y den de lado a las féminas a la hora de adjudicarle empleo, a ver cuántas bombas lapa se encuentra usted mañana en los bajos de su coche... Ya ven señores y señoras, la Ley de Paridad, la última gran parida de los que viven de su insulso voto…

martes, 24 de marzo de 2009

Todo por nada...

Tenían que verlo, tan digno, envuelto en una manta gruesa de pelillos, desafiando al frío y a las miradas de anónimos transeúntes dirigiéndose a sus lugares de trabajo. Vestía chaleco deshilachado para resguardar su cuerpecito débil de la escarcha matutina. Hambriento de verdades y justicia, veía amanecer un día más en su cruel vida con el estómago vacío y el corazón solitario. Muy de vez en cuando alguna de esas sombras que le rozaban la pelambrera se agachaba a contemplarle en el despropósito y él, recio, aguantaba miradas sin miedo a perder vergüenzas ni humildades. Jamás exigió nada, no conoció más bocado que el amargo, pero no dudó un segundo, nunca, en devolver a su amo todo el cariño y la lealtad que un día quiso ver en los ojos de un hombre golpeado por el devenir ambiguo de éste precipicio sin fondo que viene siendo la existencia. Y todo, aprendan del chucho, sin pedir ni una triste galleta a cambio…

lunes, 23 de marzo de 2009

Primaveras de papel...

Señores, señoras, queridos lectores y estimados amigos, os tengo que comunicar que el malvado invierno... ha acabado… Guarden en el ropero chaquetones impermeables y calcetines de lana, incluyan también las tardes grises con sus noches frías, escondan al fondo días sumidos en melancolía y espanto, pues ya son historia, agua pasada. Sonrían aún siendo Lunes, la sangre que corre por sus venas tiñe los pasos de posibilidades, la acuarela vuelve a tener color mientras el verde de los campos renace en el horizonte, haciendo del espacio un lugar más habitable…
Y parece como si la paz y el sosiego se instalara en los corazones de quienes pasean al atardecer, reluce el brillo en los ojos de niños que corretean tras una pelota, se hace placentero respirar buen ambiente donde semanas antes se torcían gestos bajo nubes y augurios de malos tiempos. Y ves la cosas de diferente manera, aunque sólo tengas en el bolsillo para la cerveza y la ensaladilla, todo mejora, la economía se estabiliza, las tropas regresan de la guerra, el río parece volver a su cauce, no sé, la tienda de helados de la esquina vuelve a abrir un año más, las bicis hacen el tráfico más manejable, la realidad se ve anestesiada por el reflejo de días claros y carcajadas anónimas….
Sin embargo, paladeo motivos optimistas y aún así quiero gritar ante tanto espejismo, tantos intereses bajo cortinas que nublan conciencias. Hoy medio planeta sigue muriendo de hambre mientras la otra mitad mira para otro lado. No se engañen, nunca llegó a irse el invierno caballeros, saquen de nuevo del armario abrigos y guantes, mas no olviden escondida la vergüenza, pues no merecen primaveras mundos que olvidan hermanos en el infierno…

viernes, 20 de marzo de 2009

Las semanas pasan rápido, ya es viernes otra vez, la primavera asoma en el horizonte dejando atrás mañanas heladas y atardeceres tempranos. Y vas cumpliendo días, fotocopias de los anteriores, como si nada. Sólo queda caminar amigo... Perdonen ésta semana tan corta de letras y sueños, a veces la inspiración tiene las patas muy largas y la correa demasiado corta...

jueves, 19 de marzo de 2009

Frascos de sonrisas

Los que me conocen lo saben. Tengo pocas manías, pocos tics conocidos, pero hay uno que me caracteriza, acariciarme el pelo, por muy incómodo que parezca, no sé, me relaja, me gusta el tacto del cabello entre mis dedos. Lo hago de forma inconsciente, como quien mueve nervioso los pies o parpadea ante una brizna de aire. No tiene especiales consecuencias positivas, no sirve para nada, ni siquiera produce placer extremo, lo hago sin pensarlo, no cuando me apetece, simplemente surge. Me pasa desde la cuna, desde que tenía horas de vida, según mi madre…
Y aquí viene la gracia, es el mismo gesto que mi padre hacía desde muy joven, la misma manía heredada en la generación siguiente, sin aprendizaje ni observación, mágico…
Ahora piense usted en la de cosas suyas que, sin saberlo, dependen de un ser que ya existía antes de que fueras mero proyecto de vida. Imagine el día a día de lo que hace y valore si todo es suyo o se lo debe a alguien, por nimio que parezca, y llegará a la misma conclusión que servidor, todo usted es la mejor de las firmas de un artista a un trabajo bien hecho, una obra excelsa de valor inestimable. Y todo eso es nada, porque después de entender el regalo genético en forma de vida, caerá en la cuenta del tiempo, el esfuerzo y el amor que humilde dedicó para que crecieras en un mundo merecedor de tu nombre, olvidándose si fuera necesario de sí mismo por tu simple sombra. Entonces que menos que hoy, amigo, a esa persona, le dediques una sonrisa y un “te quiero” además de la típica corbata y el frasco de colonia que huele a rutina, y si han de elegir, vacíen el frasco y llénenlo de lo primero, pues no hay mayor deseo para un padre que la felicidad de un hijo, al menos en su día…

Feliz día Padre

miércoles, 18 de marzo de 2009

Hoy no se escribe, mañana día del Padre, tengan un detalle señores, que por mucha crisis que haya algo podrán hacer con un poco de imaginación y esmero. No sucumban a los encantos de Grandes Almacenes sin alma... Hasta mañana

martes, 17 de marzo de 2009

Polis, ladrones y demás chusma...

¿Nunca han tenido un mal sueño y se han levantado cansado? Eso me ocurre hoy. En la pesadilla, un tío me seguía con una pistola que disparaba mal mientras yo trataba que no se me perdiera el perro, tan surrealista como cómico. Y claro, tanto escapar de las balas tirando del chucho ha hecho que me pegue toda la noche de aquí para allá haciendo piernas, tanto que me he tenido que dar una ducha esta mañana para aclarar los músculos. Que gracia, ya no podemos estar tranquilos ni echando un sueñecito...
Pero la realidad supera la ficción, ayer un desgraciado rompió el cristal del coche y me quitó la radio y los papeles, cosa normal si piensas que vivimos en la jungla del más fuerte. Hice la respectiva denuncia y el policía, cargadito de razón, me justificó, "-es que no se puede dejar el coche tantos días en el mismo sitio...".
Un halo de luz me iluminó, -es verdad, señor policía, cuán razón tiene usté...-, la culpa es mía por pagar mis recibos, malvivir con un sueldo que aprieta y ahoga y no cambiar el coche de sitio para que los cacos no caigan en malas tentaciones...
Perdone usted señor caco, perdone usted señor policía, múlteme señor juez...
Si algo aprendí hoy, amigos míos, es que no sólo hay ladrones en el Congreso, y es que no veo a Chaves quitándome la radio del coche, aunque cosas más raras se han visto, eso y que la integración de los "malos" sería posible, pero que yo no la quiero, me conformo con tenerlos lejos de los "buenos", y en los malos incluyo cacos, algunos policías y muchos muchos políticos...

lunes, 16 de marzo de 2009

Buenos días Mundo, una semana más, una semana menos... aprovechen que la vida es corta... terapia aplazada hasta mañana.

viernes, 13 de marzo de 2009

Infamias prenatales....

Te hablaré de lo que soñé despierto aquella madrugada de Invierno…
“Vendrás al mundo una mañana de Abril, cuando las flores pinten de azahar el horizonte y el Sol se haga perezoso en su huída. Obrarás la senda del milagro desafiando destino y naturaleza. Te recibirá tu propio llanto, divino. Tu madre te dará la bienvenida entre sus brazos dedicándote lágrimas y promesas. Serás querido y mimado, y crecerás, despierto, saboreando cada palmo de infancia entre juegos y carcajadas. Tu cuerpo se irá presentando mientras tu corazón aprenda lamentos y se bañe en la sorpresa. Caminarás descalzo sobre hierba mojada bajo la lluvia y la sonrisa, de la mano de amores efímeros de verano. Llorarás de rabia sin atisbar explicaciones y, al rato, gritarás de asombro para elevar tu alma a cumbres desconocidas y peligrosas...
No olvides mi ejemplo, amigo, quiero que te sumerjas desnudo en océanos de ilusiones, que confundas la noche con el día abrazado a la nostalgia. Quiero que saltes en precipicios de sensaciones, que aprendas destreza, que acunes verdades e imposibles. Necesitaré de tu recuerdos en la desdicha, hacer las paces con mi pluma, allí donde habita la conciencia y la espera. Morderás tus labios ante la injusticia, caerás en desidia y vileza, y te levantarás, como buen hombre, porque el perdón se inventó para espíritus libres ahogados en bondades. Te observaré, compañero, en silencio, cuidando de tus pasos como míos, sin condiciones ni negocio. Y descuida, pues mi espada acechará paciente ahuyentando miedos y reproches. Esconderé secretos y besos bajo montañas y senderos, mas te amaré hasta lo eterno…”
Y ahora no me pidas perdones, no me ruegues compasión con quien no quiso que salieras a mi encuentro porque en tu lecho olvidaran razones y cariño, no me implores que entienda a tu madre por pensar, maldita, que no era el momento, jamás suspires desde el cielo por un mundo que detesta el viento y le pone cerrojo a la vida, esa que ni siquiera sentiste y que marchitó primaveras, parando el tiempo...

jueves, 12 de marzo de 2009

Miuras con DNI

Quinientos kilos de bicho, encastao, negro zaíno, astifino y bragado. No, no hablo del toro que mató a Manolete ni de la corrida del Martes de Feria en la Maestranza. Semejante animal me lo encontré el otro día en el supermercado, al final del pasillo de los yogures, haciendo cola en pescadería. Tendría unos treinta años, mujer de gesto mezquino y amargado, empujando un carro atestado de latas de conservas y dulces, con voz molesta y malos modos. Y allí dio con sus narices, en la fila del pescado, donde hasta su llegada reinaba la tranquilidad y el agrado. Pero como quien sale de chiqueros, rebuznó lo que quiso sin esperar su turno y se fue tan ancha, gritando en desprecio a las voces que le pedían respeto y paciencia, dando coces a educadas estudiantes y señoras de trapío. Desprendía un olor fétido a carne humana descuidada mientras las lorzas de su tripa jugaban a bailar el hula-hop alrededor de su secuestrada cintura, si es que aún conservaba tal privilegio bajo esa masa deforme...
Allí me ví con mi capote, torero, rozando su cornamenta mientras galopaba a mi vera. Un Miura que nunca debió salir del campo y del yerbajo, donde viven las bestias y las moscas...
Un animal de los buenos, más allá de los kilos de más y el mal aspecto, animal por olvidar reglas sociales y palabras amables, dar de lado a la bondad y al buen hacer, aunque sólo sea por educación o apariencia. Con lo caro que cuesta ir a los toros y allí lo tuve de balde, a medio metro, sin espada y sin muleta, como los buenos novilleros. Ahora entiendo al torero y al banderillero, ¡Qué miedo Manolete!, ¡Qué miedo maestro…!

miércoles, 11 de marzo de 2009

Papeletas..

La noticia aparecía camuflada en un diario de esos gratuitos que reparten a discrección en alguna esquina de la ciudad. Poca cosa, un rincón de cien palabras olvidadas en el anonimato. Decía aquello de que el 85% de los diputados de nuestro Congreso percibían sueldo externo a su cargo, ya sea como profesor de facultad o columnista, ganando una media de 4000 euros por ese segundo trabajo. Un hecho, apunten, que va en contra de la ley, que establece claramente la incompatibilidad del cargo de Diputado con cualquier otro, pero claro, meter medio Hemiciclo en el trullo se hace tan feo como complicado,y da mala imagen externa, desde luego. Es decir, resumiendo, que los que mandan andan muy ocupados en sus cosas como para ir discutiendo sobre los españolitos, y es que hay imágenes desoladoras, como la de un Congreso semivacío a la hora de votar leyes y proposiciones, haciéndose práctica cada vez mas habitual. Con este panorama, permitan vuesas mercedes que servidor no se sienta motivado al voto, aunque pensándolo bien, sí, iré a las urnas en las próximas elecciones, y, en un voto en blanco, escribiré bien grande y en mayúsculas LADRONES, y que entre ellos se repartan la papeleta...

martes, 10 de marzo de 2009

Una noche de locos...

En unos tiempos en los que priva el coto privado de sueños, donde está limitado imaginar mundos mejores y lugares dignos, me atrevo a contar una historia, una de esas donde hombre y mujer se conocen y se enamoran, pero no sólo eso, ni mucho menos, pues lo que les relataré tiene luces de cuento de Disney con final feliz, ya saben, perdices incluídas, dando motivos a la esperanza de un destino que maltrata tanto como es maltratado…
Obviaré nombres para no reventar intimidades, así que pongamos que, Antonio, mismo, un chico apocado de mirada perdida, habiendo dedicado media vida al estudio descuidando su corazón y su bolsillo, se da cuenta un día de que está sólo, ni pareja conocida ni visos de conseguirla pronto. Antonio, que cuenta 30 primaveras, reduce su circulo de amistades a varios carcas que visten canas y alguna que otra becaria sin sustancia. Con tal panorama y, en medio de una de esas crisis existenciales en las que echa de menos compañía, decide, en secreto, entrar a una de esas páginas que te analizan tu perfil y te arreglan una cita con una muchacha con similares características o estilo. Me contaba Antonio que era reacio, que le daba corte eso de quedar mediante ese método, pero que habiendo pagado un mes de suscripción a la dichosa página, decidió tirarse a la piscina del encuentro físico con una semejante no sin antes jurarse que sólo sería una primera y última vez, nunca más, sólo una oportunidad le daba al dichoso invento....
Hecha tal promesa buscó a conciencia hasta que la encontró, una morena de ojos azules de amplia sonrisa y dos carreras terminadas. Antonio quedó con ella y se vieron en una placita del centro, era perfecta, guapa, sencilla pero interesante, lista, que no espabilada, dominaba la palabra y los modales, lo que andaba buscando, sin duda…
Y a la luz de las velas, en noche perfecta, la parejita se hacía ojitos como adolescentes, todo marchaba mejor de lo esperado, sin duda. Pero como pompa de jabón, de repente, en los postres, la morena guapa comentó que tenía que ir a tomar su medicación para una ezquizofrenia que arrastraba desde hacía tiempo. Y claro, Antonio, medio asustado, mientras ella se empastillaba en el baño, cúlpenle si quieren, se asustó y quiso irse, pero como la chica le había llevado y el restaurante quedaba lejos de todo, decidió pedir por favor a la camarera que le dijera a la de amplia sonrisa que se había ido por algún asunto urgente. Ella se negó, pero ante la insistencia cedió a esconder a Antonio en la cocina mientras le explicaba a la morena que su amigo se había marchado. Habiendo pasado un rato, entre risas, nuestro amigó le explicó a la camarera la situación exacta mientras ésta cerraba el comedor, contándole el juramento previo de no quedar con nadie más de aquella manera. Tras varias cervezas y muchas carcajadas, ella le llevó a casa y allí, en la puerta, se besaron. Hoy son marido y mujer y regentan un restaurante donde sus niños corretean entre las mesas mientras Antonio promete no jugar a caprichos con el destino. Una historia de amor de nuestro tiempo, un guiño a la esperanza, mas no pensará lo mismo la morena ezquizofrénica, aunque no dude usted, querido lector, que hasta ella tendrá otra de las buenas para contarles, terapia mediante…

lunes, 9 de marzo de 2009

NO me termino de acostumbrar a trabajar los fines de semana. Tienes la sensación de ir a contrapié, arrastrando tu carnaza mientras otros se ven relajados y ociosos. La vida del desgraciado no es plato de buen gusto, acercarme a éstas líneas de cuando en cuando es un oasis que no me pueden quitar a menos que me corten las manos, aunque mejor no dar ideas a Hacienda, que por embargar son capaces de eso y más.
Ya van casi dos años de terapia en los que he crecido y madurado, lo que comenzó una tarde de mayo con la mente perdida y la pluma torpe se ha convertido en un lugar donde hacemos un fuego y compartimos con música agradable historias que nunca nos paramos a contar por vivir en un mundo que nos domina y nos limita.
Empieza otra semana, no tengo mucho más que decir...

Relato Corto de mi Hermano Rafa

Hoy conocí a un amigo muy interesante, me sorprendió cuando se presentó, no lo esperaba, apareció cuando corría por el parque, me saludó como si le conociese de toda la vida, me invitó a sentarme en un banco con el pretexto de hablar un poco.

-Hermoso día, hoy me encuentro con ganas de repartir alegrías y ser compasivo ¿qué planes tienes para hoy?- Su pregunta me dejo bastante atónito.

-Correr un poco, ir al negocio, hacerme un poco más rico- le dije en forma de broma.

-¿Crees que ha merecido la pena? ¿Crees que has elegido el camino correcto cuando no cogiste aquel tren hace unos años?- Su mirada desafiante se clavaba en mis pupilas, había algo escalofriante en aquella mirada.

-¿Quién te crees, sabes quién soy? No me conoces de nada y vienes aquí a cuestionar mi vida- Aunque mis palabras sonaban duras no parecía prestarme atención.

-Al sur está tu espléndido negocio, envidia de necios, donde puedes seguir ganando dinero, donde se encuentra tu soledad y tiranía pero al norte está tu hijo, tu ex mujer y el resto de tu familia abandonada, quizás es un buen día para cambiar de rumbo.

-¿Quién te crees que eres, Dios?-Me levanté enfadado, con rumbo hacia el sur, intentando olvidar aquel individuo que cuestionaba mi vida de forma gratuita, mientras me coloque de nuevo los auriculares para escuchar música crucé la carretera que daba a mi negocio, lo siguiente que recuerdo es estar tendido en el suelo encharcado en sangre, con dolor en cada rincón de mi cuerpo, pidiendo auxilio a voces, de pronto sentí una mano en mi hombro, allí estaba otra vez aquel individuo.

-Te dije que hoy estaba compasivo, pero una vez mas no escuchaste, no has escuchado nunca en tu vida, has provocado daño sin importante lo más mínimo, tu dinero fue tu ruina, pero te vas como se van todos, con una diferencia, tú ni corazón te llevas, amigo siento decirte que no soy dios, solo soy… la muerte.

jueves, 5 de marzo de 2009

Fotos Malditas...

Me lo contaba mi amigo Juan mientras encendía un cigarro y se quitaba la chaqueta. Juan es muy dado a hacer viajes lejanos, a menudo poblados pobres de solemnidad en los que echa un cable a la vez que alimenta su afición por la fotografía. Otras veces visita ciudades gigantes, allí donde todo es impersonal a pesar de la vida puerta con puerta. En esos viajes y en tabaco gasta su sueldo de artista, pero siempre vuelve con diferente cara. Ese Lunes llegaba distraído, como dando vueltas a algo imposible de entender. Después de insistir, al segundo café, me contó la vivencia. Se trataba de un pueblecito pequeño, rodeado de tierras fértiles, un lugar en medio de la nada donde sus habitantes trabajaban el campo como medio de vida. Unas de las pocas distracciones de esa gente consistía en esperar a la fiesta de la llamada “Zurc”, momento en el que sacaban en una especie de palio una figura simple a la que adoraban y por la que juraban promesas por favores divinos. A “Zurc” le pedían por la llegada de la lluvia, por la enfermedad del hijo, por ellos mismos… Me contaba Juan que mientras la sacaban por sus pedregales, la gente del poblado lanzaba gritos como poseídos, casi en trance, y que incluso había quien lloraba a su paso, por no hablar de las leyendas de curaciones milagrosas. Pero también me decía que eran los mismos que después en casa maltrataban a la esposa y a los hijos, los mismos que no dudaban en matarse como animales por negocios o ser capaces de morir para recibir bendición divina. Me hablaba de los sentimientos de culpa, del papel de la mujer en esa sociedad, de los impuestos y la la corrupción del gobierno, de los pocos medios de la escuela y lo injusta de su Justicia. Casi ví asomar en Juan una lágrima cuando resumía tanta barbarie y tanto sinsentido, apretaba el puño por no entender tanta diferencia en un mismo mundo.
Abrumado por la historia, le pregunté por el nombre de la ciudad, la zona, el país, su tipo de gobierno, esperando clavar así un tachón en el mapa de la inmundicia. Fue entonces cuando Juan levantó la mirada del café y me dedicó una sonrisa, -Mejor no te lo digo, dijo. Imaginé los horrores de alguna nación integrista, esos lugares de turbantes que anteponen el dogma al sentido común, pero ante mi mirada curiosa continuó...
--… Que va!!, Estuve en un pueblo del Condado, bajando una colina, con un campanario que reza al horizonte por unos habitantes olvidados del mundo…
No quise insistir en el nombre, jamás me atreví a ver las fotos, y no sabe Juan, ese artista incomprendido, que aquel día me hizo llorar en silencio…

martes, 3 de marzo de 2009

Antidepresivos gratuitos...

Igual lo han visto, ayer en el telediario dieron publicidad a la idea de un noruego de dar abrazos "gratis" para aplacar los tiempos que corren. Tiene miga el asunto, se levanta por la mañana el tío, se pone el abrigo y se planta en media calle repartiendo abrazos gratis para quien los necesite, casi como medida medicinal ante tanto estrés de vida y carreras para todo. Al poco se le acercó una cámara de televisión y le preguntaron por la técnica. El rubio de ojos azules chamulló en un pobre español "hay pocas cosas gratis, y esto viene muy bien". Curiosa la iniciativa, y sin ánimo de lucro, parece...
Me estaba secando, dándole vueltas a la historia cuando se me ocurrió una idea parecida, "tortazos" gratis. Como oyen, puesto a hacer gilipolleces, me calzo mi polar y me voy a Sierpes con un cartelito que rece "Tortazos gratis", y cuando se acerque algún descamisado preguntando le arrio una caricia de mil pares antidepresiones que le quite la tontería. Lo creerán o no, pero un buen tortazo te quita la tristeza y el desasosiego en un plis, y se ahorra usted un dinero en psicólogos y médicos. Un buen remedio para la crisis si lo piensan, antidepresivos gratis y sin contraindicaciones, y luego, si quieren, se pueden acercar al del abrazo para que les consuele...

lunes, 2 de marzo de 2009

Tomás...



La fuerza y la garra, sin lamentos ni excusas. Con él gana lo sincero, a estocazos precisos, como los caballeros de los cuentos, a lomos de su noble doncel. Distingue honor, destila destreza, no conoce mejor gesto que la sonrisa y la bondad. Inunda el invierno de primaveras, regalando al mundo momentos para ser vividos. Estirpe de alquimistas, faciendo oro con lo justo, demostrando que el mejor de los ejemplos reside en la familia. Le echamos de menos aunque no se lo imagine. Siempre me tendrá cerca, aunque esté lejos…

Agua para gatos..

Vuelta al tajo. Ya se me habían olvidado los madrugones y el pedaleo de primera hora, el vaho empañando los cristales de mis gafas mientras me salpica en el abrigo charcos que reflejan mi desgana y mi malhumor. Retorno al cacareo incesante de adolescentes que se afanan en puertas de instituto y coches que se agolpan en una feria de pitadas a destiempo y frenazos agresivos. Me cruzo en mi camino con rostros sin alma que deambulan como si habitaran en purgatorio fantasmal, olvidando risas y siestas de fin de semana. Se acaba, quieras o no, para que mueras poco a poco y tu desgana destroce tus mejores intenciones. La llevamos clara amigo, ésto es lo que nos queda hasta que las arrugas te inunden y el cuerpo diga basta. Una novela de terror en la que usted es protagonista y elige el pincel con que dibujar una existencia con visos de fracaso, aunque con la posibilidad, eso sí, de engañar trazos al destino y colorear algunas páginas con tonos pastel, pero sólo algunas, porque capítulos como éste, llamémosle Lunes, no lo hace agradable ni Dalí con paleta infinita y hasta arriba de psicotrópicos...